En el marco de una competición de clasificación para la final que entregó el honor de ver en acción a la única discóbola que en los últimos 20 años ha logrado superar la barrera de los 70 metros, la rusa Darya Pishchalnikova con sus brillantes 70.69 de esta temporada, y quien esta tarde en el Grupo “A’’ clasificó a la definición por las medallas con un estratégico 65.02, en el cuarto lugar general de la ronda selectiva, la chilena Karen Gallardo tuvo su primera experiencia olímpica y la salvó con éxito, pues participando en el Grupo “B’’ registró un mejor envión de 60.09 para el lentejón metálico que si bien la mantuvo lejos del paso a la final, sí le valió su mejor registro de la temporada (lo tenía con 59.71) y le permitió por segunda vez en su carrera deportiva superar los 60 metros, tras los 60.48 de 2011 que se alzan como su récord de Chile. Quedó desde ya en el lugar 21 de estos Juegos de la XXX Olimpíada Londres 2012.
Su primer tiro fue de 58.82 para luego dar paso al envión de 60.09 metros que la ponía muy cercana a batir su maximarca. Pero en definitiva, el último tiro fue nulo y no pudo mejorar su registro en la tabla criolla.
Karen Gallardo, dirigida por el DT Tulio Moya, logró aunar dos criterios básicos para el alto rendimiento: mantenerse ya firme en un nivel de marcas por sobre los 60 metros, y lograrlo nada menos que en un concurso olímpico, sellando con solidez la primera incursión de lentejón criollo de un kilo, el de damas, en un cita olímpica.
La lanzadora indicó en la zona mixta, al borde la pista, que “quedamos satisfechos. Acabo de conversar con Tulio (Moya, su DT) y quedamos contentos porque pasé por segunda vez los 60 metros y lo hice en unos Juegos Olímpicos. Quedé a 39 centímetros de mi récord. Estoy contenta y preparándome para la próxima temporada. Para la final estuvo la posibilidad, la última pasó con 62, y era la marca que estábamos pensando. Uno todo los días quiere hacer un récord, pero no se puede’’.
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